Según el cura afecta a la persona que “nace con una sensibilidad especial, más necesitado de atención, de afecto, de besos, de abrazos, de juegos, de contacto físico con su padre” y lo achaca al hecho de que “el padre no se lo ha dado o no lo suficiente. No por maldad, no por negligencia (…) lo que pasa es que ese niño necesitaba más. Ese agujero queda ahí. Esa carencia acaba saliendo confundida”, aseguraba.
|
etiquetas: cura , toledo , homosexualidad , falta de cariño