"El llamado ‘milagro’ económico de China tiene un terrible coste humano: los migrantes rurales que viven en las ciudades sufren algunos de los peores abusos en sus puestos de trabajo”. “Se ven obligados a trabajar muchas horas extras, a menudo se les niegan los permisos, incluso cuando están enfermos, y trabajan en condiciones peligrosas a cambio de salarios míseros”.
|
etiquetas: china , derechos laborales , derechos humanos