El sorprendente resultado, a través de las matemáticas y el mapeado de datos sobre las propiedades corporativas, demuestra y pone nombre a uno de los slogan más escuchados en las protestas
#occupy. Tan sólo un selecto grupo, menos de un 1% de las empresas en el mundo, dominan las redes mundiales y el poder financiero en el planeta, la mayoría entidades financieras.