Las 102 familias que consiguieron una de las viviendas protegidas que el Ayuntamiento de Fuengirola sorteó, han renunciado al piso por no poder hacer frente a sus precios. Estas VPO se adjudicaron por 170.000 euros, con una letra mensual de 600 euros. La alcaldesa, Esperanza Oña (PP), les recordó ayer a estos adjudicatarios que el resto de las promociones municipales se destinarán únicamente a los sectores más desfavorecidos de la población, por lo que la única opción que les queda para acceder a una vivienda es la de renta libre.
|
etiquetas: vpo , burbuja inmobiliaria , fuengirola , málaga , pp