La muerte llegó desde el cielo azul de repente como suele ahora ocurrir en Ucrania. En agosto pasado, un cohete ruso impactó contra la tierra matando a dos jóvenes que estaban sentadas en el banco de un parque a la sombra de una iglesia. Se llamaban Kristina Spitsyna y Svitlana Siemieikina y son parte de los más de 10.000 civiles que han perdido la vida desde la invasión a gran escala de Rusia a Ucrania en febrero de 2022. La ONU cree que el número real de hombres, mujeres y niños muertos es "considerablemente mayor".
|
etiquetas: ucrania , rusia , cohete