El primer ministro británico, Gordon Brown, propuso el martes conceder al Parlamento la última palabra cuando se trate de ir a la guerra y dijo que planeaba renunciar a una gran cantidad de poderes tradicionalmente en manos del jefe del Gobierno. Las medidas están diseñadas para impulsar la confianza pública en el gobierno laborista y en la política británica, afectada por la decisión de su predecesor Tony Blair de respaldar la guerra en Irak liderada por Estados Unidos y por denuncias de debilidad.
|
etiquetas: gordon brown , reino unido , nueva política , guerra , internacional