El Ayuntamiento de Barcelona ha negado que hayan vetado la foto por tratarse de un torero. El descontento por la decisión municipal ha dado lugar a una campaña en redes sociales, donde diversos fotógrafos y periodistas han emulando la imagen del torero agrupándose bajo la etiqueta
#fotosincensura. La iniciativa ha partido del fotógrafo de AFP Pedro Armestre.