Hoy, haciendo mi trabajo de repartidor de compras de un supermercado, he hecho una entrega en un ático de lujo en el centro de Madrid. Me ha abierto la puerta el friki empollón al que yo y mis colegas masacramos a palizas en el colegio. Mientras dejaba la compra a sus pies, él me ha dado 5 euros de propina con una sonrisa diabólica. He llorado en la furgoneta y he terminado vomitando. ADV
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etiquetas: asco de vida , acoso , karma 
