"Quienes poseemos una determinada convicción, sea religiosa o no, podemos defenderla, pero no tenemos derecho a condenar o a obligar a otros a que la compartan, mientras no se afecten derechos de terceros", manifestó el cura Vicente Reale, párroco de la iglesia Jesús Nazareno, en Mendoza. Sus palabras desataron la reacción de la Iglesia. Entradilla y más información en:
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