Por primera vez en tres décadas, los habitantes de la capital de Arabia Saudí pudieron hacer algo común para la mayoría de los occidentales: fueron al cine. Pero no las mujeres.Los clérigos ultraconservadores consideran preocupantes las actividades culturales como películas y conciertos porque pueden llevar a la socialización de ambos sexos y violar los valores islámicos.
|
etiquetas: sociedad , arabia saudita , cine , religion