Andorra se ha declarado en quiebra técnica, o lo que es lo mismo: No tiene un euro. La recaudación fiscal, y de manera muy especial aquella que deriva del sector de la construcción e inmobiliario, se ha reducido muy notablemente. A esto se le suma la prudencia de los bancos a la hora de otorgar préstamos, con lo que no hay consumo y por tanto no hay recaudación. Se reduce a cero los presupuestos de aquí a final de año, y se negocian pagos a proveedores. Aunque se entiende bien, se puede traducir aquí:
internostrum.com/navegar.php