El hotel se llamará The DogHouse y no pretende ser un centro de reunión de borrachos, sino mostrar a los visitantes todo el proceso de fabricación de la cerveza, al tiempo que se pueda degustar la producción en desayunos cerveceros, durante el baño gracias a la nevera situada junto a la ducha o, directamente, sumergiéndose en una bañera llena del dorado líquido.
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