Respiro hondo para no escribir temas que no atañen a las mujeres, pero resulta que algunos temas siempre terminan entreverados. Me explico: el pasado jueves no había terminado de contestar los comentarios que amablemente me habían escrito las personas que leen mis artículos, ese día a propósito del Yunque, cuando me entero de una nueva patraña que mucho tiene que ver con este tema.
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