Seguimos usando las peores contraseñas posibles; aún así, incluso aunque usemos una contraseña segura, estamos expuestos a este tipo de hackeos y filtraciones masivas de claves. La última filtración es de un total de 617 millones de contraseñas, que vienen de 16 webs que fueron hackeadas a lo largo del año pasado, y desde finales del año 2016. Y una vez más, como ha ocurrido con Collection
#1, y con Collection
#2-#5, todas estas contraseñas ya se han puesto a la venta en la deep web.