Un tuit que se ha vuelto viral presenta un vídeo donde un presunto extranjero, entusiasta de la cocina, intenta fusionar tres clásicos de la gastronomía valenciana.
reemplazando el caldo tradicional por esta bebida dulce a base de chufa, a la que añade canela y la piel del limón
Más que paella, es un arroz con leche pero con horchata, así que seguramente esté bueno...
Pues que queréis que os diga, a mi me da ganas de probarlo, es como un arroz con leche pero en lugar de leche ha usado horchata (eso si, el crimen es que es Chufi), le ha puesto unos tradicionales fartons encima, y como lo ha hecho en una sartén grande (o sea, una paella) pues se le puede llamar paella
Si en un restaurante de fusión posmodernista te decostruyen un arroz con leche de chufa y desmigado de fartóns y te lo ponen en la carta de postres, estoy seguro que tendría éxito.
#12 Completamente de acuerdo.
Sólo tienen que cambiarle el nombre, llamarle "Arroz con leche de chufa y fartons", ponerlo como postre, y a lo mejor hasta está bueno y todo.
A ver, valencianos, voy a decir de una vez lo que todo el mundo calla por miedo: el valor de la paella es que te tiras toda la mañana cocinándola, es una excusa para tener a tu familia reunida en el campo o playa y puede comer muchísima gente de una vez. Y que en los 60 llamaba mucho la atención de los guiris en la playa, tan amarillita. Ya está. Si nos atenemos a los valores gastronómicos, no hay forma concebible de meter la paella entre los 50 mejores platos de la cocina española.
www.youtube.com/watch?v=nB5ayiMrmDs
Más que paella, es un arroz con leche pero con horchata, así que seguramente esté bueno...
Si en un restaurante de fusión posmodernista te decostruyen un arroz con leche de chufa y desmigado de fartóns y te lo ponen en la carta de postres, estoy seguro que tendría éxito.
Veo que #8 ha pensado en lo mismo.
Sólo tienen que cambiarle el nombre, llamarle "Arroz con leche de chufa y fartons", ponerlo como postre, y a lo mejor hasta está bueno y todo.
A ver, valencianos, voy a decir de una vez lo que todo el mundo calla por miedo: el valor de la paella es que te tiras toda la mañana cocinándola, es una excusa para tener a tu familia reunida en el campo o playa y puede comer muchísima gente de una vez. Y que en los 60 llamaba mucho la atención de los guiris en la playa, tan amarillita. Ya está. Si nos atenemos a los valores gastronómicos, no hay forma concebible de meter la paella entre los 50 mejores platos de la cocina española.