Palacios espectaculares, castillos, antiguos cuarteles, minas. Para reducir su estratosférica deuda, que se acerca dramáticamente a los dos billones de euros, Italia vende algunas de sus joyas. En la denominada "fase 2" de su plan para salvar a Italia, el gobierno técnico de Mario Monti, que sigue intentando dar señales fuertes a los mercados, siempre nerviosos por la capacidad de pago del país, se alista en septiembre no sólo a poner en marcha varias privatizaciones, sino también a vender parte del patrimonio del Estado italiano.