Liberio Trujillo, de 59 años, falleció el martes, tras consumir aguardiente durante 16 días sin parar, según informaron fuentes locales. El hombre que se encontraba disfrutando de las fiestas de San Juan y San Pedro que terminaron el pasado domingo, murió como consecuencia de un infarto fulminante, a raíz de la cantidad de licor que ingirió. Según sus familiares, Trujillo empezó a consumir aguardiente desde el día en que se dio apertura a las fiestas y lo hizo hasta ayer cuando lo encontraron sin signos vitales en su mecedora.