El 16 de junio de 1936, José María Gil-Robles, líder del partido católico y conservador español de la CEDA, describió así la crisis que vivía España en el último mes de la Segunda República, durante uno de sus discursos en el Congreso de los Diputados: «Desengañaos. Un país puede vivir en monarquía o en república, en sistema parlamentario o en sistema presidencialista, en un sistema soviético o en el fascismo, pero como únicamente no vive es en anarquía. Y España, hoy, por desgracia, vive en anarquía [...].