El magnate estadounidense Elon Musk, el mayor accionista de la firma automotriz Tesla y propietario de la red social X (antes Twitter), ha echado un pulso a Suecia por huelgas y convenios colectivos del que podría salir muy malparado, a medida que sindicatos de otros países como Dinamarca y Noruega se van sumando a la protesta al entender la postura de Musk como una agresión al modelo nórdico de mercado laboral. El aludido, furibundo, calificó en la red X la situación de “locura”.