Hablamos de bebidas con una gran capacidad de rehidratación compuestas por agua, bajas dosis de sodio (cloruro sódico o bicarbonato sódico), sales minerales (potasio, cloro y fósforo), hidratos de carbono simples (glucosa, fructosa, dextrosa, sacarosa) y complejos (polímeros de glucosa). Algunas también incorporan magnesio, calcio, ácido cítrico, vitaminas, colorantes, aromatizantes y edulcorantes...