Hay menos dinero de plástico en las carteras. Esas dos, tres o incluso más tarjetas de pago que muchos españoles llevan consigo han ido a la baja desde que comenzó la crisis, pese a que el importe que mueven se ha recuperado desde la caída que sufrió en 2009, el año más negro de este largo declive. En concreto, más de ocho millones, tanto de crédito como de débito, han desaparecido de la circulación en España en poco más de dos años: los 76 millones de 2008 han caído a 68, un 10%, el pasado marzo, según los últimos datos del Banco de España.