El concurso lo ganó en octubre de 2011, con una activa implicación del Rey Juan Carlos, un consorcio de 12 empresas españolas (entre ellas Renfe, OHL, Cobra e Ineco) y dos saudíes (Al Shoula y Al Rosan). El consorcio (competía con la francesa Alstom y la SNCF) se adjudicó el proyecto de construcción de una línea ferroviaria de alta velocidad que unirá las ciudades de Medina, Yeda y La Meca en Arabia Saudí. Cesce, empresa creada en 1970, participada por el Estado en un 50,25% y en proceso de privatización, ha avalado también al consorcio