Muy pocos saben hasta que punto la sociedad actual está manipulada y controlada por el llamado “Estado Profundo”, en parte por la pereza mental de quienes rechazan investigar por su cuenta, limitándose a la pseudo-información inocua, sesgada y mentirosa que le suministran los centros de poder, y en parte por el rechazo a aceptar que somos simples dóciles marionetas dirigidas mediante ingeniería social, propaganda, "fake news" y "post-verdades", técnicas de control mental, teléfonos, redes sociales, 5G, redes satelitales, chemtrails, fármacos y