Es fácil ser antitaurino, es fácil oponerse a la caza y es fácil estar en contra de vestir pieles. Son posiciones que no implican prácticamente ninguna renuncia ni incomodidad. El salto que implica un verdadero cambio en tu patrón es dejar de comer animales. Eso sí cuesta. No vestir pieles no implica una renuncia, dejar de comer animales sí.
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Yo no renuncio a las chaquetas de piel ni a la carne, pero no apruebo el maltrato animal: bastante que lo sacrificaremos, al menos hagámoslo con respeto.
www.healthline.com/nutrition/4-reasons-some-do-well-as-vegans
Y dejar de comer animales no es 'dejar de comer', que es lo que decía el comentario del meneante al que respondo.
"ni cuando nos compramos una camiseta queremos que ese niño o esa niña esté en Vietnam o en China fabricando nuetra camiseta"
Ironías del siglo XXI
Bonito concepto, digno de los nuevos meapilas.