Medios israelíes revelan ataques contra escuelas de Gaza con el objetivo de obligar a los civiles a vaciar zonas

Según el canal 12 de Israel, el ejército israelí lleva meses intentando desalojar esta región, pero se ha enfrentado a la resistencia de la población de Gaza, que en su mayoría ha preferido permanecer resistente en sus casas y se ha negado a acatar las órdenes de evacuación.

[#1 A.more]

Para mí son el pueblo malditos por siempre. Les deseo todo el mal que provocan estos asesinos. Siempre que lea males de Israel lo celebrare. Son demonios

[#2 Drazul]

#1 Al final va a parecer que el pintor austriaco del bigote recortado era un visionario...

[#6 Pablosky]

#2 primero: un nazi siempre está equivocado, siempre.

Segundo: los que fundaron Israel pactaron con los nazis, ya que los usaron para desestabilizar esa zona, que estaba bajo el dominio inglés en los años 30.

Tercero: los que murieron en el holocausto no eran casi ninguno sionistas, ya que esos ya se habían ido.

Cuarto: cuando llegaban refugiados a Israel justo despues de la segunda guerra mundial algunos hijos de puta que vivían allí los llamaban “jabón”, y no eran los árabes precisamente.

[#3 Romfitay]

#1 Y además parece que les da igual que una mayoría cada vez más grande de la Humanidad nos hayamos dado cuenta y pensemos lo mismo que tú.

[#4 Fernand15253404]

#1 En mi opinión no son demonios, al igual que no lo eran los nazis, o los Yemenes Rojo.
Son un pueblo enfermo de odio y racismo en todas sus vertientes. Una enfermedad inoculada a propósito y a conciencia durante años por una élite política, económica y religiosa, escondida tras una ideología ultranacionalista y segregacionista cómo es el sionismo.
Creo que el pueblo israelí está manifestando, proyectando y devolviendo en el pueblo palestino, toda la rabia, dolor, menosprecio que ha ido…   

[#5 Fernand15253404]

#4 De Israel han huido amplías capas de población, gente de clase media alta, profesionales altamente cualificados y una minoría no sionista. Israel está sumida en una vorágine de odio y violencia de la que difícilmente podrá escapar sin convertirse en un estado teocrático, no democrático, en el que triunfarán y prosperarán las facciones del sionismo más extremistas, las que sean capaces de conectar de una forma más pura con el odio, el victimismo, el revanchismo y la idea primordial de ser el pueblo elegido para gobernar el mundo, una vez hecha la correspondiente limpieza racial, religiosa y cultural necesaria.