Me gusta hacer montaña. Sobre todo ascensiones en Pirineos en las que te das un buen pateo, y a veces pasas por sitios en los que hay "patio", como se le suele llamar. Luego llegas a casa y te das cuenta de que no necesitas ansiolíticos ni antidepresivos; canjeas el esfuerzo físico, que a veces es elevado, y un poco de riesgo, que no siempre, por un bienestar y un optimismo y una sensación de estar en paz contigo mismo que sólo conocen quienes lo han probado. Federado, lo que incluye un seguro; con experiencia en la "materia"; y con el equipo …