Hay un par de episodios de Cazadores de Mitos que abordan esta cuestión, son interesantes.
Del artículo del meneo el detalle que creo es más interesante es el de fijarse en las burbujas (o generarlas nosotros) para saber la dirección hacia arriba. Es una obviedad pero es bueno tenerlo presente antes que se den las circunstancias, no sea que en ese momento no se nos ocurra.
Me recuerda los años 50 siendo un niño, formando y cantando antes de entrar en clase, en clase rezar, y los Sábados rosario varias horas
aquel que se despistada, palazo en la cabeza, que tiempos aquellos.
Es verdaderamente desasosegante que se lastre a toda una generación de jóvenes y a sus familias con un listón económico tan alto y doloroso para acceder a estudios superiores. Hablamos del presente y futuro de este país reflejado directamente en la formación y preparación en conocimiento, destreza y talento para los cientos de oficios que la sociedad del siglo XXI requiere.
¿Acaso seguimos creyendo, como en tiempos pretéritos, que rezándole a la Virgen del pueblo nos aseguramos el desarrollo y crecimiento de nuestra sociedad? ¿A quién extraña que la opción de coger las maletas para no volver haya crecido exponencialmente en la última década?
La Iglesia católica romana ha sido históricamente el campo fecundo donde se ha cultivado ideológicamente la homofobia, desde tiempos inmemoriales. En particular, la homofobia que pulula por España son los residuos de la homofobia alimentada y cuidada por la Iglesia franquista.
Por tanto, no sorprenden las palabras del obispo. Lo que llama la atención es que no tenga el repudio generalizado de una sociedad democrática y respetuosa con los DDHH desde todos los estamentos.
La religión es un cáncer. Estos obispos o lo que sean deberían estar en frenopáticos. Adultos disfrazados con sábanas haciendo que hablan con un ser invisible todopoderoso...
Mi madre me educó con la siguiente máxima:
"Me tenés que entender. De una forma u otra, tenés que entender".
A la primera falta, una explicación lógica y razonable. A la segunda, una explicación en un tono más fuerte.
A la tercera, un castigo.
Y acá estoy, no me he muerto, no estoy traumatizada, soy una persona normal y corriente, y no necesité entonces ni ahora que ningún psicólogo aficionado o profesional venga a darme consejos.
Tiene guasa la cosa. Tan importante no será "la defensa del ciberespacio" o no serán tan peligrosos los "ciberterroristas" si no quieran dar un euro para ello.
Crean un pais dividido, con grandes brechas como los cadáveres que aún andan en las cunetas y con unas desigualdades económicas y de trato terribles. Después, quieren que la gente salte "en defensa de la patria". No sé si es que están cegados o se intentan reir de nosotros directamente.