#42 No sé a qué viene tanta pataleta. También se acusa a diestra y sinestra de putinistas, putinejos, putinetes, como te pregunta #34, censores y defensores de dictaduras sin derechos humanos (sic) y no pasa nada salvo tragar un poco de bilis, responder y a otra cosa mariposa. Deberías estar acostumbrado.
#26 Ya he dicho que cualquiera puede hacerlo si sigue las normas.
Si finalmente se vuelve a demostrar que este usuario u otros ya presentes en la página no son más que clones e iteraciones de otros sancionados en el pasado será una nueva victoria pirrica para que ésto no se converta en un foro de propaganda.
Lo mismo decían cualquiera de los siete pasados, qué van a decir si no, eran clones con agenda.
#17 Yo no puedo más que hablar por mí. Con el uso de VPN lógicamente las IP no será la única herramienta que tendrá la administración para detectar los clones.
Si crees que te he acosado en alguno de mis 6 mensajes, 7 con éste, ahí abajo tienes el botón o invoca de nuevo a admin.
#14 Haz lo que tengas que hacer. Desde que @achtung te "acusó" curiosamente ya indiqué la lista de clones de pin. Yo no he podido ser más transparente en mis contestaciones.
#11 Te voy a hacer una confesión. Lo mío parte desde cuando en esta página había dos usuarios, pin y pon por ejemplo, que eran especialistas en noticias antichina y antirrusia. Digamos que pin era el antichina y pon es el otro.
A lo largo de su desquiciada carrera de manipulación y propaganda acabaron strikeados en varias ocasiones por la administración y pin incluso acabó baneado. Pon ha cambiado de usuario en al menos dos ocasiones e incluso se hizo pasar por dos usuarios en el nótame. Es entrañable.
Desde la invasión Rusa de Ucrania pin ha ido creando una serie de clones, siete al menos, que se ha centrado en noticias lógicamente antirrusas, de manera casi sistemática. Diría que esas dos cosas, las campañas y el crear nuevos usuarios para sortear las sanciones del lugar son acciones expresamente prohibidas por las normas del lugar.
Habrá gente que opine y yo soy uno, que todo el mundo puede mandar y opinar lo que le de la gana, de la misma manera que pueden estar en desacuerdo contigo, decírtelo e incluso votarte negativo, pero, siempre siguiendo las normas del sitio, y ese usuario multiclónico no lo hace.
Creo que eres uno de ellos, pin, para ser exactos, pero lógicamente no estoy seguro. Por eso te lo pregunto. Lo sospecho porque pin suele actuar de una forma muy concreta: Los envíos propagandísticos que ya he explicado, el comentar todos sus envíos, la queja porque no se apoyan lo suficiente, los llamamientos a la administración, el uso de memes incluso repetidos de clon a clon, el uso de coletillas que en sí ya son un meme como acusar al resto de "defensores de dictaduras sin derechos humanos" "censura", en fin, muy previsible. Edit: Añado que los primeros clones eran muy dados al ignore cuando eran detectados.
Ahora confiesa, ¿te sientes identificado?
#7 Yo hablaba en general.
Desde hace meses no hace más que repetirse el mismo usuario una y otra vez con mensajes antichinarrusia, incluso antes de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
¿Quién eres? ¿Nos conocemos? ¿He hablado contigo antes? Es por ir adelantando trabajo y completar la estadísitica de clones
#2 Viejas fotografías muestran a Filatyev de adolescente con una telnyashka azul y blanca (la tradicional camiseta interior azul y blanca que llevan los militares) entre sus compañeros, luego colgado de un carrusel durante el entrenamiento de paracaidistas, y después, ya mayor, bien afeitado y con camuflaje color canela posando con un rifle en Crimea antes de que comenzara la guerra.
Nacido en el seno de una familia de militares en la ciudad sureña de Volgodonsk, Filatyev, de 34 años, pasó gran parte de sus 20 años en el ejército. Tras servir en Chechenia a finales de la década de 2000, pasó casi una década como entrenador de caballos, trabajando para la empresa rusa de producción de carne Miratorg y para clientes adinerados, antes de volver a alistarse en 2021 por motivos económicos, según dijo.
Ahora es un hombre cambiado. Sigue siendo un hombre poderoso y elocuente, pero la guerra y el estrés le han pasado factura. Sus mejillas llenas de cicatrices están cubiertas por una barba de dos semanas. Todavía no puede ver bien por su ojo derecho. Y se ríe amargamente de tener que quejarse del ejército ruso ante un periodista extranjero y de "venir a hablarte como un cura con cervezas".
"Dicen que el heroísmo de unos es culpa de otros", afirma. "Estamos en el siglo XXI, empezamos esta guerra idiota, y una vez más pedimos a los soldados que lleven a cabo actos heroicos, que se sacrifiquen. ¿Cuál es el problema? ¿No nos estamos muriendo en eso?".
Sobre todo, se preguntaba por qué seguía libre. Había oído que su unidad se estaba preparando para acusarle de deserción, una acusación que podría llevarle a la cárcel durante muchos años. Y, sin embargo, no pasó nada.
"No entiendo por qué todavía no me han cogido", dice al encontrarse en una estación de tren de Moscú. "He dicho más que nadie en los últimos seis meses. Quizá no sepan qué hacer conmigo".
#1 En un momento dado, Filatyev describe cómo los voraces paracaidistas, la élite del ejército ruso, capturaron el puerto marítimo de Kherson e inmediatamente empezaron a apoderarse de "ordenadores y cualquier bien de valor que pudiéramos encontrar". Luego saquearon las cocinas en busca de comida.
"Como salvajes, allí comíamos de todo: avena, gachas, mermelada, miel, café... Nos importaba un bledo todo, ya nos habían llevado al límite. La mayoría había pasado un mes en el campo sin ningún tipo de comodidad, ni ducha, ni comida normal.
"A qué estado salvaje se puede llevar a la gente por no pensar en que necesita dormir, comer y lavarse", escribió. "Todo lo que nos rodeaba nos producía una sensación de vileza; como desgraciados sólo intentábamos sobrevivir".
Filatyev dio una profunda calada a un cigarrillo mientras relataba la historia, mirando nerviosamente a su alrededor por si alguien le observaba en un parque moscovita cerca de la medianoche, y luego intenta explicarse.
"Sé que a un lector extranjero le parecerá una salvajada", dijo, describiendo a un compañero que robó un ordenador. "Pero [el soldado] sabe que esto vale más que uno de sus sueldos. Y quién sabe si estará vivo mañana de todos modos. Así que lo coge. No intento justificar lo que ha hecho. Pero creo que es importante decir por qué la gente actúa así, para entender cómo detenerla... Lo que una persona hará en este tipo de situaciones extremas".
Se ensañó con lo que llamó la "degradación" del ejército, incluyendo el uso de equipos y vehículos anticuados que dejaban a los soldados rusos expuestos a los contraataques ucranianos. El fusil que le dieron antes de la guerra estaba oxidado y tenía una correa rota, dijo.
"Éramos un blanco ideal", escribió, describiendo el viaje a Kherson en camiones UAZ obsoletos y sin blindaje que a veces se quedaban parados durante 20 minutos. "No estaba claro cuál era el plan: como… » ver todo el comentario
#5#6
La de piruetas tramposas que hacéis los fanboys de la OTAN para justificar lo injustificable.
Supongo que te tiene que fastidiar no poder usar el comodín de "oh, es propaganda rusa, no es fiable".
He puesto un enlace de un periódico muy conocido de EEUU.
A lo mejor eso te debería hacer reflexionar que, llegado el momento, los gringos se desentenderán del títere Zelensky como ya lo han hecho con Juan Guaidó.
#270 Y tú lo has leído? Si quieres hacemos un listado de cosas que son "información torticera que muestra su punto de vista" y cuales son hechos contrastables que muestran que lo que ocurre en Ucrania es algo más que o blanco o negro.
Por cierto, "el militar" que tú dices, es capitán de la armada española y doctor en seguridad internacional. Pero claro, copia de RT... Los artículos de CNN, WashingtonPost, BBC,AlJazeera, TheGuardian, Telegraph o incluso fuentes basura ucranianas como EuroMaidanPress, esas no te interesa mentarlas.
#5 El 20 de marzo, tras 25 días de ocupación, los rusos permitieron que la mayor parte del personal ucraniano de Chernóbil se fuera rotando (Semenov se quedó, ya que sus homólogos estaban asediados en Chernihiv, tenían hijos pequeños o se habían alistado en las Fuerzas de Defensa Territorial). "Me alegré mucho de irme", me dijo Kutenko. Como el puente sobre el Dniéper estaba destruido, había que transportar a los trabajadores. Algunos de los marineros que trabajaban en los barcos veían este servicio como una colaboración y se negaban a participar.
Los rusos se acercaban a Slavutych. El 22 de marzo, las fuerzas rusas dieron un ultimátum para que la ciudad se rindiera antes de las 3 de la tarde del día siguiente. En la primera semana de guerra, Yuri Fomichev, alcalde de la ciudad de 46 años, formó una unidad de defensa territorial, reforzando los 50 policías locales con 150 voluntarios, "básicamente el número de rifles que teníamos". Pero en Slavutych no había armas pesadas ni esperanza de apoyo militar.
El 23 de marzo, los rusos avanzaron tímidamente, disparando varias salvas en el puesto de control más alejado de la carretera de Slavutych. Al día siguiente "empezó el tiroteo de verdad", dice Fomichev. Ambos puestos de control fueron destruidos, matando al menos a tres personas. El propio Fomichev fue detenido por soldados rusos que le parecieron extrañamente deferentes. Uno de ellos le pidió un selfie. "Tenía las manos atadas y me apuntaba con una pistola", recordó, "pero era como si siguiera respetando mi autoridad porque yo era el alcalde".
Mientras Fomichev era interrogado, los rusos observaron las imágenes de un dron sobre una protesta que se estaba fomentando en Slavutych. Fomichev sugirió que podía ayudar a calmar los ánimos. Se había reunido una multitud de 5.000 personas, entre las que se encontraban los cuatro highliners que no habían podido salir de la ciudad. La multitud desplegó una bandera ucraniana… » ver todo el comentario
#4 Había suficiente comida en la central para varias semanas. El personal acudía al comedor dos veces al día para comer sopa de remolacha, carne, ensalada de col, trigo sarraceno y tarta de queso. Tenían de todo excepto pan fresco. A los pocos días, uno de los tres cocineros se desplomó de agotamiento. Sacaron a los cuatro highliners que habían estado encerrados en el sótano para ayudar. "No puedo decir que estuviéramos cocinando", dice Kostya Karnoza, un veinteañero despreocupado que, cuando no anda entre cables, trabaja en tecnología. "Estábamos cortando verduras y lavando platos".
De vez en cuando charlaban con los soldados rusos, que comían por separado, durante las pausas para fumar. "Sus primeras preguntas fueron: '¿Dónde están las bases de la OTAN? ¿Dónde están los banderitas [nacionalistas de derechas] causando todos los problemas?", dijo Kostya. Las tropas se jactaban de que Kyiv sería tomada en tres días. Cuando el avance ruso se estancó, argumentaron que estaban luchando contra un temible ejército de soldados estadounidenses, legionarios extranjeros franceses y criminales a los que Volodymyr Zelensky, el presidente de Ucrania, supuestamente había liberado de la cárcel. "Nos preguntaron: '¿Por qué el gobierno ucraniano no se rinde? ¿No quieren la paz?". Algunos admitieron que no sabían por qué estaban allí. Los rusos se sorprendieron al saber, por los archivos de personal, que muchos empleados, hijos de liquidadores que llevaron a cabo la limpieza, habían nacido en Rusia.
Un soldado ruso había traído un solo uniforme porque pensaba que estaba en un ejercicio de entrenamiento
Los highliners son empresarios y desarrolladores de software, miembros de una ingeniosa nueva generación de ucranianos. La ignorancia y la hipocresía de los rusos les pareció ridícula (entre otras cosas, los rusos les robaron sus cámaras GoPro, bancos de energía y algunos calzoncillos). Un highliner me contó que conoció a un policía ruso en… » ver todo el comentario
#1 Valeriy Semenov es un hombre ágil, enérgico y parlanchín de unos 40 años, con un rostro de huesos crudos y una gran sonrisa. Nació cerca de la ciudad de Saratov: "No quiero decir Rusia, porque entonces era la URSS". El pueblo en el que creció era pobre; recuerda una tienda local con "neveras vacías y tres granadas y el esqueleto de una vaca sin carne en los huesos". Cuando Semenov tenía 13 años, sus padres se trasladaron a Slavutych para trabajar como liquidadores. Tras ellos, a los 18 años, él mismo se incorporó a una cuadrilla de limpieza de residuos radiactivos. Su supervisor era Valentin Geiko, con quien dirigiría la planta bajo la ocupación rusa casi 30 años después. Ahora ha pasado toda su vida laboral en Chernóbil: es licenciado en ingeniería y física, y ha trabajado en la mayoría de los departamentos de la central: almacenamiento de combustible, gestión de residuos nucleares, control de la radiación y, finalmente, seguridad.
Conocí a Semenov en Slavutych cuatro días después de su regreso de Chernóbil. Dijo que toda su vida, desde la primera infancia, le había preparado para su papel bajo la ocupación. Aunque estaba agotado, su historia salía a borbotones. Cogió un bolígrafo y un papel para dibujar diagramas del lugar: "El edificio de la administración estaba aquí, como ven, mi edificio - no, no puedo decirles el nombre de mi edificio. ¡Es secreto! - estaba aquí". A veces se paseaba por la habitación, gesticulando para explicar puntos técnicos, midiendo distancias con las manos.
Hablé con Semenov durante varios días en abril. Durante ese periodo, el servicio secreto ucraniano también le estaba interrogando. "Pero contigo tengo que filtrar un poco", me dijo guiñando un ojo. "Algunas cosas son asuntos de seguridad nacional".
En los primeros días de la ocupación, los rusos intentaron utilizar sus pases para abrir todo tipo de puertas y portones. Semenov dijo que les dijo: "Mirad las fotografías de las… » ver todo el comentario
#29 Zizek no se ríe de nadie, simplemente, como todos, está contra el imperialismo y, sobretodo, contra los hipócritas:
Tras el ataque ruso a Ucrania, el gobierno esloveno proclamó inmediatamente su disposición a recibir a miles de refugiados ucranianos. Como ciudadano esloveno, no solo me sentí orgulloso, sino también avergonzado.
Después de todo, cuando Afganistán cayó en manos de los talibanes hace seis meses, este mismo gobierno se negó a aceptar a los refugiados afganos, con el argumento de que debían quedarse en su país y luchar. Y hace un par de meses, cuando miles de refugiados -en su mayoría kurdos iraquíes- intentaron entrar en Polonia desde Bielorrusia, el gobierno esloveno, alegando que Europa estaba siendo atacada, ofreció ayuda militar para apoyar el vil esfuerzo de Polonia por mantenerlos fuera.
la mejor manera que tiene Europa para contrarrestarla es tender puentes hacia los países en desarrollo y emergentes, muchos de los cuales tienen una larga lista de reclamos justificados contra la colonización y la explotación occidentales. No basta con "defender Europa". La verdadera tarea es convencer a otros países de que Occidente puede ofrecerles mejores opciones que Rusia o China. Y la única manera de lograrlo es cambiar nosotros mismos desarraigando sin miramientos el neocolonialismo, incluso cuando viene empaquetado como ayuda humanitaria.
Ante la opinión, fundada, de Zizek, tienes la realidad de las acciones yankis y Europeas: vetar a ciertos refugiados, detener a periodistas, perseguir la opinión que no se alinea con la oficial, enviar armas, seguir alimentando al imperialismo anglosajón y, lo más grave, ignorar completamente la dimensión de protesta social del Maidan para apoyar a gobiernos autoritarios, como son el de Poroshenko y Zelenski, encargados de incorporar al extremismo de derechas al ejército regular y seguir atacando a su propia población civil, a las alternativas políticas y prohibiendo o limitando la cultura, el idioma y los símbolos de esa población rebelde.
#9#13 A que no tiene huevos de hacerlo mismo con Íhor Kolomoiski, su jefe, quien le puso en el poder y mueve sus hilos, que es además de Ucraniano, Israeli y Chipriota? es.m.wikipedia.org/wiki/Íhor_Kolomoiski