#1
A ver, tu comentario es bastante fácil y demuestra que no tienes ni idea de lo que implica ser un deportista de este nivel, así que voy a dejarte unos datos y razonar un poco. Igual te sirve para entender por qué este tipo de casos son especiales y merecen un enfoque distinto, especialmente en lo que a impuestos se refiere.
Primero, correr mundiales es carísimo. ¿Sabías que competir un año en el JuniorGP puede costarle a una familia 200.000€? Sí, 200 mil euros. Y eso es solo el inicio. Desde pequeños, estos chavales (y sus familias) hacen auténticos sacrificios económicos: hipotecarse, pedir préstamos, buscar sponsors… todo por un sueño que, en la mayoría de los casos, tiene más pérdidas que ganancias.
Segundo, sus carreras en la élite son cortísimas. Estamos hablando de unos 5-7 años, con suerte. Pero para llegar ahí, muchos ya han invertido muchísimo más de lo que llegan a ganar. Por ejemplo, un equipo de Moto2 puede cobrarle a un piloto entre 10.000€ y 40.000€ por carrera, dinero que tienen que buscar ellos mismos con sponsors o poner de su propio bolsillo. ¿Te imaginas la presión de saber que todo lo que has hecho puede quedarse en nada? Solo los top-top consiguen vivir sin gastar de su bolsillo o ganar decentemente.
Tercero, el riesgo. No sé si te das cuenta, pero se juegan la vida cada día. Van a 300 km/h con lo único que les protege siendo un mono de cuero, guantes, botas y un casco. ¿Sabías que el año pasado Carlos Tatay tuvo un accidente que lo dejó paralítico? Ahora tiene que pagar de su propio bolsillo las terapias porque el seguro no cubre todo. Esto no es fútbol ni tenis, donde te lesionas y sigues con tu vida; aquí una caída te puede dejar paralítico o matarte, y no hay un colchón económico detrás en la mayoría de los casos.
Así que sí, algunos se van a Andorra. Pero viendo cómo funciona esto, a mí no me parece que lo hagan por capricho. No tienen el mismo colchón que otros deportistas o artistas, ni el mismo tiempo para acumular un patrimonio. Quejarse de ellos sin entender todo esto es de no saber lo que se dice.
Lo fácil es criticar, pero lo difícil es informarse antes de soltar comentarios vacíos. Te lo dejo ahí para que reflexiones.
#27 el que iba prefiere tener la culpa de no ir, que perder el sponsor x o el contrato y del que detrás está alguna empresa prima de el hormiguero. Las cosas funcionan así. Tristemente. Pero para todo. Que es más triste todavía
#10 Este esperpento de izquierdas es precisamente lo que está haciendo que la derecha ultra y radicalizada, crezca y se normalice de manera que nunca debió hacerlo.
La falta de autocrítica, las guerras internas, los conflictos de intereses a la hora de repartirse migajas y el no tener líderes con las ideas claras como las tenía Anguita, está abocando a este país a una temporada de extrema derecha en las instituciones.
Parecía (al principio) que Pablo Iglesias iba a ser su sucesor y ha resultado un pluf. Solamente hay que mirar atrás y ver cómo ha cambiado todo desde aquel 15 de Mayo del 2011, hasta ahora...
#1 Para ponerlo peor. Esos menas ayudaron (y mucho) a limpiar el skate plaza para que los vecinos lo pudieran utilizar (ellos no tienen monopatines).
(4:40) youtu.be/6UcUWMSm-TE?feature=shared
#1#6#2#5#9 lo que pide VOX es una estupidez pero como está escrito el artículo y como manipula dando a entender que esta pidiendo una cosa mucho peor es lo peor que puedes hacer contra ellos. Os tiene que cegar mucho el odio para no entender que este tipo de artículos ayudan más a VOX de lo que le hacen daño.
A ver, tu comentario es bastante fácil y demuestra que no tienes ni idea de lo que implica ser un deportista de este nivel, así que voy a dejarte unos datos y razonar un poco. Igual te sirve para entender por qué este tipo de casos son especiales y merecen un enfoque distinto, especialmente en lo que a impuestos se refiere.
Primero, correr mundiales es carísimo. ¿Sabías que competir un año en el JuniorGP puede costarle a una familia 200.000€? Sí, 200 mil euros. Y eso es solo el inicio. Desde pequeños, estos chavales (y sus familias) hacen auténticos sacrificios económicos: hipotecarse, pedir préstamos, buscar sponsors… todo por un sueño que, en la mayoría de los casos, tiene más pérdidas que ganancias.
Segundo, sus carreras en la élite son cortísimas. Estamos hablando de unos 5-7 años, con suerte. Pero para llegar ahí, muchos ya han invertido muchísimo más de lo que llegan a ganar. Por ejemplo, un equipo de Moto2 puede cobrarle a un piloto entre 10.000€ y 40.000€ por carrera, dinero que tienen que buscar ellos mismos con sponsors o poner de su propio bolsillo. ¿Te imaginas la presión de saber que todo lo que has hecho puede quedarse en nada? Solo los top-top consiguen vivir sin gastar de su bolsillo o ganar decentemente.
Tercero, el riesgo. No sé si te das cuenta, pero se juegan la vida cada día. Van a 300 km/h con lo único que les protege siendo un mono de cuero, guantes, botas y un casco. ¿Sabías que el año pasado Carlos Tatay tuvo un accidente que lo dejó paralítico? Ahora tiene que pagar de su propio bolsillo las terapias porque el seguro no cubre todo. Esto no es fútbol ni tenis, donde te lesionas y sigues con tu vida; aquí una caída te puede dejar paralítico o matarte, y no hay un colchón económico detrás en la mayoría de los casos.
Así que sí, algunos se van a Andorra. Pero viendo cómo funciona esto, a mí no me parece que lo hagan por capricho. No tienen el mismo colchón que otros deportistas o artistas, ni el mismo tiempo para acumular un patrimonio. Quejarse de ellos sin entender todo esto es de no saber lo que se dice.
Lo fácil es criticar, pero lo difícil es informarse antes de soltar comentarios vacíos. Te lo dejo ahí para que reflexiones.