La ministra británica de Transportes, Ruth Kelly, se disculpó ayer ante el Parlamento por la pérdida en mayo pasado en EE.UU. de los datos personales de más de tres millones de aspirantes a conductores en el Reino Unido. Entre la información extraviada figuran los nombres, las direcciones y los números de teléfono de los afectados, pero no los números de sus cuentas bancarias ni de sus tarjetas de crédito, aseguró Kelly. Los datos estaban contenidos en un disco duro propiedad de un contratista privado..."
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