“El próximo día 24 de marzo iremos a desalojarles de su casa. Si no se van, llamaremos a las fuerzas de orden público. Si dejan los muebles, entenderemos que los han abandonado”. Este es el lacónico aviso de desahucio que recibieron Pedro Rubira, María Teresa Riquelme (en la imagen) y sus dos hijos de 7 y cuatro años. Una empleada de la CAM, añadió por su cuenta que “llamaremos a la asistente social para que te quiten los niños”.
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