Este tipo de fotografías [realizadas en el siglo XIX por Jean Laurent], que nos hacen viajar en el tiempo, son dignas de ser contempladas con calma porque nos descubren estampas reales de épocas ya muy lejanas. Es más, conociendo los lugares retratados, resulta sorprendente el ejercio de comparar el estado actual de esas ciudades con el de hace más de un siglo. Vía:
www.alpoma.net/tecob/?p=5050