Es indiscutible su aportación a sus equipos, su ambición, su total dedicación y su amor incondicional por ESPAÑA. Una personalidad provocativa, su tendencia a trabajar más por sí mismos que por el equipo, su amor por los focos y por hacer putaditas a compañeros de equipo. Eso les lleva a enfrentarse con el entrenador de sus respectivos equipos; entrenadores que no tendrían ningún inconveniente en mandarlas al banquillo pero que deben enfrentarse a una prensa afín e incondicionalmente entregada, su popularidad y al sector ultra de la afición.
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