Desde 2006 a 2011 se han pagado casi dos millones de euros en productividad a estos «responsables de departamento contratados a dedo», según la información recopilada por el sindicato CGT y que remitieron en febrero al Tribunal de Cuentas. La CGT también han presentado una denuncia por presunta prevaricación y malversación a la Fiscalía Anticorrupción. Vaersa se enfrenta a un expediente de regulación de empleo (ERE) en el que la Conselleria de Medio Ambiente, de quien depende la empresa pública, pretende despedir a 350 trabajadores
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