Brenden Foster se está muriendo de leucemia. El pasado miércoles expiraron las dos semanas que los médicos habían estimado de supervivencia. En una última entrevista (ver video:
'Watch the story') Brenden confiesa que quiere llevar comida al campamento de los 'sintecho' que hay cerca del hospital. No tiene fuerzas para levantarse de la cama, pero el hospital ya está preparando 200 sándwiches. Via neatorama:
www.neatorama.com/2008/11/09/last-wish/