El Tribunal de Justicia Andaluz determina que la excusa que el sindicato UGT de esta comunidad para despedir a 130 de sus trabajadores en noviembre de 2012 no se corresponde con la realidad. El sindicato alegó que la decisión se basó en la desaparición de distintos programas de fomento de empleo subvencionados por la Junta de los que depende el sueldo de estos trabajadores fijos-discontinuos. Un dato falso ya que recibió 23 millones de euros de ayuda para estos programas.
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