Toneladas de basura electrónica van a parar al tercer mundo, muchas de ellas como ayuda al desarrollo en forma de ordenadores de segunda mano que supuestamente funcionan. La quema de componentes produce gases y vertidos que afectan a las poblaciones y al medio ambiente de forma terrible. Reciclar en Europa de manera profesional y responsable un ordenador de tubo puede llegar a costar 3,5 euros. Enviar ese mismo ordenador a Ghana en un contenedor para su reciclaje cuesta 1,5 euros.
|
etiquetas: ghana , pakistan , basura electrónica