La verdad es que su apodo como Tito se lo pusieron sus camaradas españoles de la época, incapaces de pronunciar su nombre. Existen varios testimonios de soldados españoles que dicen haberle visto en el frente o en la retaguardia de Cataluña, ya sea en el casino de Cardedeu (Barcelona), en el norte de Girona, Castellón o Lleida. Pero lo más sorprendente es que otras fuentes le situan en Madrid, en la casa de un militar español que acogió a importantes personajes en su época como es Vicente Rivera Gutierrez, según cuenta el nieto de este.
|
etiquetas: tito , guerra civil , antifascismo