Solo un milagro económico puede evitar que comiencen a escasear los apósitos, algodón, látex, jeringas e instrumental quirúrgico en los hospitales y centros de salud de la Comunidad Valenciana. La falta de liquidez de la Conselleria de Sanidad para hacer frente a la deuda contraída con los proveedores de material sanitario ha llevado a buena parte de los empresarios a una situación límite en la que se han visto obligados a recurrir para obtener financiación de los bancos y mantener el suministro a los centros de la conselleria.
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