El Arzobispado de Sevilla sale bien parado del primer año de la puesta en marcha del último acuerdo económico Iglesia-Estado. En virtud de este convenio, quedó suprimida la dotación directa estatal a la Iglesia a cambio de aumentar el coeficiente de la asignación tributaria del IRPF de un 0,52% a un 0,7%. El Arzobispado de Sevilla trabaja este año con una previsión de ingresos en concepto de asignación tributaria de 4,6 millones de euros, casi un 37% más que el año anterior y un 43,11% más que hace dos años.
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