Una joven peluquera de 19 años, Jennie Mitchell, murió al explotarle el contenido químico de varios esprays que transportaba en una bolsa mientras conducía su vehículo, un Mini. La mezcla de varios productos químicos (peróxido de hidrógeno) que transportaba en su bolsa de belleza crearon un cóctel letal que se inflamó como una bomba al encender un cigarrillo en el interior del habitáculo. En inglés.
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