Para los neerlandeses el Día del Recuerdo, una ceremonia tradicional de conmemoración en Amsterdam, se volvió en pánico y caos. Este fue causado por un hombre que gritaba en la multitud de miles de personas durante 2 minutos el silencio. El pánico se genero rápidamente, y personas resultaron heridas en el caos. El hombre dice que lamenta que 63 personas resultaron heridas. Según su abogado, el solo estaba borracho. Eso es todo. Un borracho gritó, y toda la multitud pensó que había habido algún tipo de ataque. Seres Humanos!
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