Con las tasas universitarias por las nubes, las ayudas a la dependencia bajo mínimos y la sanidad pública en el servicio de urgencias, el Gobierno nos tiene preparadas más sorpresas para el final de año. Y es que siempre es posible descubrir nuevos filones para la empresa privada en el sector público. Esta vez el objetivo, por sorprendente que parezca, son las prisiones.
|
etiquetas: recortes , privatizaciones