El portero de un edificio de la calle Luis Morote, José Eufemiano P. D., negó ayer ante la Audiencia Provincial de Las Palmas que le clavara una catana a un inquilino tras recriminarle el ruido doméstico de sus altavoces. La víctima, que lleva 15 años en silla de ruedas por un accidente de motocicleta, tenía en vilo a la comunidad de vecinos por su actitud "provocadora y molesta".
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