Pero, como no puede ser de otra forma, entró, con su fácil manera (por lo superficial aunque rastrera) de hacer las cosas en un terreno que debería saber está vedado a aquellos que sólo pretenden hacer daño a la fe de muchos millones de españoles y, también, a la de creyentes católicos de todo el mundo.
|
etiquetas: wyoming , camineo