No entiendo que sí aceptemos pagar a escote el agujero que ha dejado la especulación inmobiliaria en el sistema financiero, y no tengamos recursos para curar a quienes enferman, sean pobres o ricos. Por supuesto, al final habrá que priorizar unas cosas u otras. Y yo prefiero mil veces pagar para que un inmigrante o un parado sin cobertura tengan la misma atención médica que cualquiera, que para organizar en Madrid los Juegos Olímpicos del 2020.
|
etiquetas: despilfarro , reforma sanitaria , inmigrantes