Una comunidad de determinadas babushkas resiste en la Zona de Exclusión de Chernóbil. "Dispáranos y cava las tumbas, de lo contrario nos quedaremos" les dijeron a los funcionarios. Nadejda Gorbachenko (80) salta la alambrada para recoger setas y bayas. "Un halcón vino y se comió mi pollo, así que lo golpeé con un palo" dice Hanna Zavorotnya (78). "Yo no tengo miedo de nada. Es difícil ser vieja, pero todavía quiero vivir" dice Galina Konyushok (71), exliquidadora con cáncer de tiroides. "Vuelva usted mañana. Vamos a la fiesta".
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