Estefanía tiene dos hijos, pero hoy sufre porque, para la ley, esos pequeños no tienen madre. De niña era obligada a usar el baño de varones y las burlas no se hacían esperar. Sufre desde chica estos malos entendidos debido a que su documento nacional de identidad posee, increíblemente, el nombre de un varón: Edgardo César González. Los problemas afectan también a sus hijos. "No puedo tramitar la operación de una de las manos de mi hija de cuatro años porque, para la ley, no soy la madre."
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