Acabo de cumplir diez años en este sitio, y puedo afirmar que conozco un poco la composición social del lugar, como la conocéis muchos de vosotros.
Lo gracioso del asunto es que con mucha frecuencia se hablan pestes del empresario, se piden cabezas, se agita la revolución, se propugna la desobediencia, se siguen las consignas más revolucionarias y se presume de verdadera izquierda. Pero todo desde el exterior, como un grupo de blancos bienpensantes defendiendo los derechos de los negros.
En Menéame no hay clase obrera. Aquí hay, como mucho, asalariados empobrecidos, trabajadores precarios y gente puteada por las circunstancias. Pero poco o nada que ver con el viejo proletariado.
En Menéame hay muy pocos trabajadores manuales. Hay sobre todo trabajadores intelectuales, de silla y pantalla, pero muy poca gente que se manche las manos, llegue a casa realmente sudado, haga un gran esfuerzo físico o conduzca un camión, por ejemplo.
En Menéame hay un nivel cultural MUY alto, para lo que es la clase obrera. La gente que trabaja en cualquier mierda porque nunca ha acabó el instituto, no está por aquí. La gente que consume cuatro quintos de su ocio en entretenimientos embrutecedores no está por aquí. Este, amigos, es un medio escrito donde se requiere comprensión lectora y capacidad de expresión, y aunque nos arrojemos unos a otros cosas "como tu comprensión lectora es inexistente" y mierdas así, lo cierto es que por aquí no viene ninguno de esos millones de españoles, como veinte millones (en serio) que ni entiende lo que lee ni es capaz, ni de lejos, de escribir lo que piensa. Y además, en Menéame, si pones dos faltas de ortografía seguidas te cae la del pulpo. Porque no es un sitio donde eso se tolere.
Menéame es un foro de gente con formación alta, ingresos medio-altos y preparación política entre alta y muy alta. Nada que ver con las masas poligoneras. Nada que ver con los trabajadores manuales. Por cada uno que trabaja de camarero hay ocho programadores. Por cada uno que conduce un camión una excavadora y cuenta con esa única cualificación, hay veinticinco licenciados en algo.
Tengámoslo en cuenta, por favor, cada vez que pensemos que representamos, o siquiera entendemos, el voto de las masas trabajadoras. Porque por aquí hay cada vez más gente hablando de los trabajadores como si fuesen biólogos hablando de los insectos.
Y me jode.