Ha nacido una nueva casta ideológica que está calando, y bien, en nuestra sociedad. Se trata de los neopuritanos progresistas y, en esencia, su doctrina se basa en imponer a todo hijo de vecino una moralidad regida por una estricta corrección política. Sin demasiados recursos y en apariencia sin demasiado poder, los neopuritanos progresistas son capaces de doblegar al enemigo más pintado. La semana pasada le tocó, por ejemplo, a Dolce & Gabbana.
|
etiquetas: neopuritanos , censura , libertad de expresión